Viernes, 26 de Abril del 2024 
Un nuevo derrumbe se registró en los Acantilados de la Costa Verde esta mañana a la altura del Lima Marina Club en Barranco. Este suceso ha originado el cierre de uno de los carriles de la transitada vía generando gran congestión vehicular.
Con este hecho se van registrando dos deslizamientos de gran magnitud en lo que va del año, lo que ya originó decretar en estado de emergencia toda la zona y buscar soluciones que permitan acabar con estos sucesos que, hasta el momento, no han cobrado vidas. Ante ello, los especialistas esperan que se tomen cartas en el asunto para que no ocurra un accidente fatal.
Es por ello, que en PERÚ CONSTRUYE, conversamos con el Ingeniero Raúl Delgado Sayán, Presidente Ejecutivo de CESEL Ingenieros, quien nos presentó una interesante propuesta para acabar no solo con los deslizamientos, sino para prevenir a la ciudad capital de un tsunami, posterior a un terremoto de gran magnitud. En ese sentido, el Ingeniero catalogó a los acantilados no como un problema sino como una bendición.
Y es que, junto a un grupo importante de personas de la compañía que representa, idearon un proyecto que consta de una importante descarga del peso de material del suelo superior del acantilado.
Para eso, se aplicaría la construcción de andenería a partir del retiro establecido desde el borde del acantilado y se protegería el talud con muro pantalla inferior de concreto. Todo esto permitiría rebajar el peso del talud en un orden aproximado de 1 millón de toneladas por cada kilómetro.
Según el Ingeniero Raúl Delgado, el proyecto busca preservar el activo social, económico y atractivo para la población de la ciudad de Lima de los acantilados de la Costa Verde, garantizar la vida y seguridad de los ciudadanos que habitan y trabajan tanto al pie de la Costa Verde, como en la parte superior de los acantilados y dar protección real al pie del acantilado sobre las condiciones extremas propias de un fenómeno natural como un tsunami.
