Lunes, 20 de Mayo del 2024 
A 575 se elevó el número de damnificados y a 145 las personas afectadas por el fuerte sismo que se registró la noche del sábado en la provincia cusqueña de Paruro y que dejó hasta el momento 8 muertos y 4 heridos, según el reporte actualizado del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci). Asimismo hay 70 viviendas inhabitables, 45 colapsadas y 30 dañadas. El movimiento telúrico de 5.1 grados de magnitud también causó el colapso de cuatro instituciones educativas, una escuela afectada y un templo en condición inhabitable.
Personal de la Dirección Desconcentrada del Indeci Cusco indicó que la Municipalidad Provincial de Paruro coordina realizar los trabajos de limpieza en la carretera Paruro–Misca, interrumpida en diez tramos; y efectuó labores de rehabilitación en los tramos de la carretera Paruro–Cusibamba-Toroy-Pincoc. A las 14:50 horas del domingo, un avión Antonov AN32 Nº 324 de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) llevó 2.71 toneladas de raciones frías movilizadas por Indeci desde el almacén central en la ciudad de Lima, y 0.1 toneladas de medicamentos proporcionado por el Ministerio de Salud (Minsa).
También trasladó ayuda humanitaria el Gobierno Regional del Cusco, consistente en techo, abrigo y enseres; y la Municipalidad Provincial de Paruro distribuyó colchas, colchones y frazadas. Por su parte, personal de la Dirección Desconcentrada del Indeci Cusco dio a conocer que realizan trabajos de armado de carpas en el campo deportivo de la localidad de Misca, para albergar a las familias damnificadas; y que se coordinó con la empresa Electro Sur Este el restablecimiento del servicio eléctrico, además de la instalación de dos reflectores para el albergue de las personas afectadas.
Tras lamentar la muerte de las ocho personas durante el sismo de 5.1 grados de magnitud ocurrido en la provincia cusqueña de Paruro, el ministro de Educación, Jaime Saavedra Chanduví, expresó las condolencias a los familiares de las víctimas –entre los cuales figuran tres escolares– y explicó que inmediatamente después de ocurrido el temblor, los coordinadores locales y un equipo del Programa de Reducción de la Vulnerabilidad y Atención de Emergencias por Desastres (Prevaed) del Minedu, se movilizaron hasta Paruro para realizar la evaluación de daños e identificar las necesidades de la comunidad afectada.
También subrayó que como parte de las medidas de ayuda inmediata, el Centro de Operaciones de Emergencia (COE) del Minedu ha enviado a la zona especialistas en atención y respuesta ante emergencias. De igual modo, ha remitido materiales o kits pedagógicos de respuesta, que constan de treinta equipos de soporte socioemocional, diez lúdicos y diez de gestión del currículo. En el distrito de Paruro hay 27 instituciones educativas donde laboran 25 docentes y estudian 900 estudiantes. Al respecto, el ministro anotó que toda esa infraestructura será evaluada para identificar su situación tras el fuerte sismo.
El director de Sismología del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera Huarache, precisó que el valle del Cusco está controlado por un sistema de fallas geológicas muy grande que se reactivan con eventos sísmicos de magnitudes del orden de 5 y 5.8 por ejemplo, lo que genera el daño que se observa actualmente en la provincia de Paruro, donde la noche del sábado de registró un movimiento telúrico de 5.1 grados. El denominado sistema de fallas del Cusco está compuesto por la falla de Surite en la parte norte, la falla de Tambomachay, al costado, y las fallas de Paruro y Vilcanota, en la zona sur.
Tavera Huarache añadió que generan daños porque están muy cerca de las localidades cusqueñas, donde prevalecen las viviendas de adobe y quincha que resultan más afectadas. El especialista del IGP subrayó que debe entenderse que el daño o desastre que se produzca en una localidad por la ocurrencia de un sismo no depende de su magnitud, sino de la cercanía a la ciudad. “Eso es lo que ha pasado ahora, el evento está bastante cerca de la localidad de Paruro y ha generado bastante daño”, puntualizó.
El sismo se produjo muy cerca de la localidad de Paruro, sólo a 7 kilómetros, y a 8 kilómetros de profundidad. A eso se debió el nivel de sacudimiento bastante alto en la zona, explicó. A esto hay que sumarle el hecho de que las viviendas en la zona son de adobe, muchas de las cuales están muy dañadas por el paso del tiempo, anotó. “Entonces hay muchos factores que han contribuido a que se produzca el desplome de más del 90 por ciento de viviendas y que ocasionó la muerte de varias personas”, refirió.
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