Los nacionalistas apelan su suspensión por 120 días

Los siete parlamentarios nacionalistas suspendidos por el Pleno del Congreso, por 120 días de legislatura sin goce de haber, no están dispuestos a abandonar sus curules sin dar la batalla. El portavoz de la bancada humalista, Fredy Otárola, anunció ayer que recurrirán “ante el Poder Judicial, el Tribunal Constitucional y ante los organismos internacionales vinculados a la defensa de la democracia y de los derechos humanos” para hacer respetar su posición de rechazo frente a los sucesos ocurridos, días atrás, en Bagua, que derivaron en la muerte de 24 policías y de nueve nativos.

“Vamos a utilizar todos los medios que la Constitución nos franquea. Vamos a dar las respuestas legales, jurídicas y políticas, dentro del marco de la ley, que un acto dictatorial amerita”, informó el parlamentario, tras señalar que, como primer paso, su grupo ha presentado una solicitud para que se reconsidere la votación de la suspensión a siete legisladores nacionalistas.

PÚBLICAS DISCULPAS. En ese contexto, Otárola replicó los comentarios del titular del Congreso, Javier Velásquez Quesquén, quien opinó que los parlamentarios suspendidos deben ofrecerle disculpas a la población y, además, comprometerse a no protagonizar nuevos incidentes. En términos similares se pronunció el premier Yehude Simon, quien les recomendó a los nacionalistas que ofrezcan disculpas e, inclusive, se ofreció como mediador para que se deje sin efecto la sanción.

La respuesta de Otárola, sin embargo, fue negativa. “Nuestra vigilia era por la paz y en defensa de la vida en forma pacífica. ¿Por eso vamos a ofrecer disculpas? Nosotros ya no estábamos en el hemiciclo (cuando se aprobó la sanción), por lo que se debió dar por superado el incidente.
Cuando uno reclama no tiene por qué ofrecer disculpas (…) Que nos pidan disculpas ellos”, declaró en rueda de prensa.

En predios políticos, sin embargo, hubo respaldo mayoritario a la medida disciplinaria. El jefe de Estado, Alan García, opinó que es un paso fundamental del Parlamento para ganar el respeto ciudadano, mientras que la presidenta del PPC, Lourdes Flores, expresó que, en un momento de crisis, “es necesario que el Congreso sea escenario de diálogo y no de exacerbación de pasiones”. El alcalde de Lima, Luis Castañeda, a su turno, también avaló la sanción “más aún –dijo– cuando se trata de alguien que tiene la responsabilidad de ser un modelo de conducta”.