Si bien el colesterol es una sustancia natural que es esencial para muchas de las funciones del organismo, cuando se excede, ya sea por tener una vida sedentaria o por una dieta alta en alimentos con colesterol malo, trae consecuencias que afecta la productividad laboral, como la falta de rendimiento intelectual.
Y es que el colesterol en exceso, definido como hipercolesterolemia, es un factor de riesgo de infarto, entre otros males vasculares.
De acuerdo con la American Heart Association (AHA), una dieta alta en grasas saturadas, trans y colesterol, pueden elevar los niveles de este último en la sangre, poniendo a uno en grave riesgo de padecer enfermedades del corazón.
Por lo anteriormente descrito es entonces importante que se conozca cuáles son los alimentos que tienen elevadas cantidades de colesterol malo, para que de esa forma se reduzca la ingestión en la dieta. Estos son algunos de ellos.
Es un de los productos lácteos que son ricos en nutrientes, con calcio, vitaminas, proteínas y minerales, pero si uno elige aquellos de “grasa entera” se estará recibiendo fuertes dosis de grasas saturadas.
Hay que considerar que una pieza grande contiene cerca de 186mg de colesterol concentrados en la yema. Entonces, la clave con el huevo es la cantidad; siempre es bueno para la salud siempre y cuando se controle su ingesta.
Si se consume un huevo en el desayuno, que es importante para comenzar el día, es clave no ingerir el resto de las fuentes de colesterol durante el resto del día. Nada mejor que complementarla con porciones de verduras en lugar de carne.
Alimentos como la papas fritas, hamburguesas o pizzas, tienen un elevado contenido de grasas trans, las cuales son peores para el colesterol malo porque además de aumentarlo, reducen el colesterol bueno y complican la inflamación.
Es conocido por contener grasas saturadas además del colesterol; además de un elevado contenido de ácido palmítico, un elemento que obstruye las arterias.
Este alimento contribuye hasta en un 8.5% a la ingesta de grasas saturadas. Lo que considerablemente supera la recomendación de los dietistas de consumir no más del 7% de éstas en las calorías de cada día.
Estos, junto al tocino y las costillas proporcionan al organismo hasta el 4.9% del consumo de grasas saturadas. Así que es mejor elegir grasas saludables provenientes de aceites vegetales, el pescado e incluso el aguacate.
Aquí las papas no son el problema, sino el resto de los componentes. Mayormente el puré de papas se la prepara con elevadas dosis de mantequilla, leche entera, crema o queso, convirtiendo este alimento saludable como es la papa, en una bomba de grasas saturadas.
Por ello es mejor que se límite al máximo el consumo de estos alimentos con colesterol malo, y que se incluya en al dieta diaria cebada, avena y otros granos enteros, soya, berenjena, grasas omega 3 y fibra. Y, claro; hacer también ayudará.