Viernes, 26 de Abril del 2024
turismo



Strauss Kahn, director del FMI, habría sufrido de un “complot” en su contra

Publicado el 16/05/11

Un día antes de su arresto, un amigo de Strauss Kahn había denunciado a la prensa que Sarkozy estaba conspirando en su contra. La clase política francesa es casi unánime: izquierda y derecha hablan de un montaje

No sólo se atienen a la presunción de inocencia. Los políticos galos se muestran suspicaces frente al desliz de uno de sus mayores exponentes a nivel mundial y el político mejor posicionado de cara a las presidenciales de 2012.

Cabe decir que no es la primera vez que Strauss-Kahn se enreda en un problema de faldas, pero la reacción frente a este nuevo escándalo (más grave que el de 2008, cuando sólo fue acusado de una relación impropia y el asunto no pasó de una investigación interna en el FMI por eventual acoso y abuso de poder) fue de incredulidad y de desconfianza: la sospecha, si no de un “complot” al menos de una “manipulación”, surgió de inmediato.

Para Jean-Marie Le Guen, diputado socialista por París, no hay dudas: una campaña de ataques contra DSK, como llaman en Francia a Dominique Strauss-Kahn, estaba siendo orquestada desde el palacio del Eliseo. Lo denunció públicamente el sábado, casi como una premonición, un día antes del incidente en el que se vio involucrado su camarada y que puede costarle la carrera.

La acusación de Le Guen había sido motivada por una serie de artículos en la prensa referidos a un supuesto tren de vida lujoso del director del Fondo Monetario Internacional, algo que en Francia es muy mal visto por parte de un político, del que la república espera una actitud austera y contenida, no en lo que concierne a las mujeres, sino en materia de consumo suntuario.

El arresto de DSK el domingo en Nueva York encontró por lo tanto a Francia enfrascada en la discusión sobre si es ético o no que sus dirigentes tengan un comportamiento ostentoso y, aunque no hubo dudas sobre el origen de su patrimonio, sí surgieron reproches al “descuido” de un dirigente que aspira a la presidencia, cuando uno de los valores republicanos más apreciados en el país es la austeridad de los políticos.

Pero no debe pensarse que la teoría del complot fue esgrimida sólo por los amigos de DSK. La primera en exponer la tesis conspirativa no fue una personalidad de izquierda, sino de derecha: la presidente del Partido Demócrata Cristiano, Christine Boutin: “Probablemente le tendieron una trampa a Dominique Strauss-Kahn, y él cayó en ella”. A la pregunta de quién pudo hacerlo, respondió: “Puede venir del Fondo, de la derecha o de la izquierda francesas”.

Dominique Paillé, asesor de Jean-Louis Borloo, presidente del Partido Radical y miembro del gabinete de Sarkozy hasta noviembre de 2010, dijo que alguien puso “una cáscara de banana” en el camino de un hombre cuya “vulnerabilidad” en materia de mujeres es bien conocida.

Más allá de que hay mucho trecho por recorrer antes de poder establecer si hubo o no complot, lo cierto es que motivaciones no le faltarían a la actual presidencia francesa. Por primera vez, un mandatario en funciones corre el riesgo de perder su reelección en primera vuelta. La crisis económica y el desgaste del partido oficial, laUMP (Unión para la Mayoría, de centro derecha), han acelerado la recuperación de los socialistas (PS), pero también el ascenso de la extrema derecha nacionalista, el Frente Nacional, encabezado ahora por Marine, hija de su tradicional dirigente, ahora retirado,Jean-Marie Le Pen.

Articulo completo



Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *