La respuesta del régimen comunista ha sido el despliegue de misiles SA-2 en su costa occidental, cuyo alcance es de entre 13 y 30 kilómetros.
El bombardeo de la isla surcoreana de Yeonpyeong el martes causó la muerte a dos marines y a dos civiles.
Seúl realizaba ejercicios militares en la zona en ese momento, pero dijo que no disparó contra su vecino del norte.