Jueves, 28 de Marzo del 2024
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La maquina celeste de los Incas y el Centenariazo

Publicado el 09/05/13

Garcilazo ya está entre los ocho mejores en la Libertadores

La alegría desborda los corazones peruanos, inclusive los que pensaban que el equipo humilde del Cusco, no podría dar talla esta noche frente al Nacional en el mismo Centenario, y me incluyo, pues creo que muchos de nosotros, dejamos de llegar temprano a casa porque no imaginábamos que los dirigidos de “Petroleo” García demostraran pundonor y disciplina en la cancha, que no se amilanaran frente a una hinchada rival, en un estadio casi lleno, pues como muy pocos el Real Garcilazo, con solo tres años de creado, hoy dio el Centenariazo.

Los Incas empezaron el partido siempre con una misma función defensiva, el Profesor Fredy García imponía ese futbol defensivo, que estorbaba siempre las ideas de los rivales, cerrando bien los espacio; mientras pasaban los minutos los uruguayos se desesperaban por no encontrar el gol, y esto llenaba de confianza a nuestros paisanos, después de vivir un intenso primer tiempo y esperando que el nefasto arbitraje del Paraguayo Amarilla no nos perjudique, nos íbamos al descanso, a refrescar ideas y a repotenciar aún más las marcas personales en las pelotas paradas. El susto para nosotros llegaba en el minuto once del segundo tiempo, un balón detenido nos complicaba mucho la marca en el área, cuando Gonzalo Bueno sin marca alguna pescaba un rebote y de cabeza ponía el primero, que a pesar de lo difícil que era la defensa cusqueña, le daba muchas esperanzas a los locales de poner más goles, y más aún cuando en seguida llegaban dos cambios importantes, nada menos que el loquito Sebastian Abrey y el Chino Alvaro Recoba.

Sin embargo, los peruanos ya habían perdido el miedo, defendían a mas no poder y no solo eso, empezaron a intentar llegar tibiamente al arco rival, la lucha de Ferreira, Ramos, Herrera y Retamozo era incesante, alimentaban una esperanza a nuestros corazones blanquirrojos que necesitábamos de una clasificación a cuartos de final de Libertadores que en los últimos años no era muy común, y desde el Pipa Carranza que fue uno de los mejores, que no tuvo miedo al remate muy fuerte de Alvaro Recoba que casi lo estampa en su arco hasta Mauricio Montes que también aportó su granito de arena al entrar en los últimos minutos para tapar las salidas de un Nacional que crecía en angustia mientras pasaba el tiempo y llegaba el final.

Era el turno de los penales, como muchos dicen la ruleta rusa, un juego de azar, una definición que podría estar para cualquiera por cuestión de suerte, y tal vez fue así, un especialista como el chino Recoba mandaba su fuerte remate a la tribuna en el primer penal de los uruguayos, esto llenaba de nerviosismo a sus compañeros y fue así porque en el remate de Arismendi se le notaba inseguro y que después de mandar su remate por arriba del travesaño empezó a llorar, había fallado el tercer tiro de los doce pasos después de que el marcador estaba a favor de los cusqueños por tres goles a uno, era obvia su indignación, es cuando el balón es tomado por el paraguayo Gamarra y su remate potente vence la valla del portero Bava. Entonces el Cusco explotó, el Perú explotó, la algarabía de la clasificación en Libertadores es más que un triunfo para nosotros, clasificamos de la mano de la “cenicienta del campeonato”, como así lo han denominado muchos, vamos Garcilazo, vamos por más.

Luis Angel Polin



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