La policía griega fue alertada nuevamente hoy al descubrirse en Atenas un nuevo paquete bomba enviado a la embajada francesa. Tras un operativo montado en la zona, el artefacto fue detonado sin causar daños.
El objeto fue enviado por desconocidos con remite del arzobispado de Atenas. La embajada gala lo devolvió a la empresa de mensajería, donde fue desactivado de forma controlada por la policía.
Otros tres paquetes sospechosos fueron detectados en una empresa de mensajería en Markopoulo, cerca de Atenas. Según informó la radio pública, un equipo de expertos ha comenzado a examinarlos.
El paquete desactivado hoy era similar a los enviados desde el pasado lunes a diferentes embajadas en Atenas y a políticos como la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
A raíz de los ataques, Grecia decidió ayer suspender por 48 horas todos los envíos de correo por vía aérea al exterior. Las fuerzas de seguridad griegas sospechan que los proyectados atentados fueron obra de grupos clandestinos de extrema izquierda.