
Lima, 04 de Febrero del 2025.-Según proyecciones del Instituto de EconomÃa y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), la economÃa peruana cerrarÃa el 2025 con un incremento del 2.8%. Esta proyección refleja un ritmo más moderado que el esperado para el año anterior.
«El crecimiento de 2,8 % para 2025 destaca por su moderación, pero también resalta la importancia de diversificar nuestra economÃa. Sectores como la pesca y la construcción, que enfrentaron caÃdas en 2024, muestran señales de recuperación aunque insuficientes para un impulso significativo», señaló Milagros Torres, subdirectora académica de la Facultad de Negocios de Zegel.
El comunicado detalla que los sectores con mayor crecimiento en 2025 serán pesca (5.1%), construcción (3.7%), electricidad, gas y agua (3.3%) y manufactura (3.2%). Asimismo, sectores como comercio y agropecuario registrarÃan avances del 3.1%.
«El incremento en la producción de cobre será clave para consolidar al sector minero como uno de los motores fundamentales de nuestra economÃa. La CCL proyecta para este sector un crecimiento del 2.6%», detalló Milagros Torres.
Por otro lado, el sector servicios, que representa una parte significativa del PBI, sawalcanzarÃa un crecimiento del 2.9%, impulsado principalmente por el consumo privado, según indicó el informe del IEDEP.
Desde la perspectiva del gasto, el consumo privado, que representa el 65% del PBI nacional, crecerÃa un 2.9% este 2025. Factores como la recuperación del empleo formal (aproximadamente 4,5 millones de trabajadores) y la disponibilidad de ingresos extraordinarios, como el retiro de la CTS, fortalecerÃan esta expansión.
«Si bien el consumo privado se recupera lentamente, su impacto no será suficiente para resolver problemas estructurales como el déficit de empleo adecuado. Necesitamos polÃticas más agresivas que fomenten la inversión y la generación de empleo formal», añadió Torres.
La inversión privada, el segundo componente más importante de la demanda interna, se proyecta con un crecimiento del 2.5%, una señal de mejora frente a la incertidumbre de años anteriores. Sin embargo, la inversión pública enfrentará una desaceleración drástica, reduciendo su expansión del 12.5% en 2024 al 2.9% en 2025, debido a un menor ritmo de gasto en infraestructura.
El déficit fiscal también muestra una ligera mejora, cerrando en -2,5 % del PBI para 2025, frente al -2,9 % del año anterior. Este ajuste está vinculado a una moderación en el presupuesto público, que crecerá solo un 4,6 %, después de varios años de incrementos acelerados.
Con estas proyecciones, el Perú enfrenta un año crucial en 2025, donde el desafÃo será transformar los modestos avances en oportunidades para una mayor inclusión y bienestar social.