Los Angeles, 09 de Enero del 2022.-Sidney Poitier, quien murió el pasado 6 de enero, a sus 94 años, fue intérprete, director, actor, diplomático y activista en su más de medio siglo de carrera y actividad. Poitier ganó un Óscar en 1964.
Casi por encima de su sello como primer actor afroamericano en conseguir un Óscar (“Lilies of the Field”, 1964), Poitier fue el sÃmbolo de Hollywood durante el movimiento por los derechos civiles, un periodo en el que se convirtió en la mayor estrella de la industria del cine americano.
El fallecimiento de Potier ha sido confirmado por el ministro de Asuntos Exteriores de Bahamas en un comunicado en el que no precisa más detalles de la causa de la muerte del legendario actor, nacido en Miami en 1927 y de padres naturales de la isla de Cat.
Intérprete, director, actor, activista y diplomático
El intérprete, director, activista y diplomático estadounidense de origen bahameño fue un auténtico Ãdolo de Hollywood, con medio centenar de pelÃculas a sus espaldas, entre las que destacan To Sir, with Love”, “In the Heat of the Night” y “Guess Who’s Coming to Dinner”, estrenadas entre junio y diciembre de 1967 – justo cuando las calles ardÃan-, éxitos que cimentaron su icónico estatus en la sociedad estadounidense.
Esas interpretaciones, que en mayor o menor medida hablaban del racismo en EEUU, ayudaron a derribar las barreras sociales entre afroamericanos y blancos, y le convirtieron en la primera gran estrella negra de la industria.
Su figura fue un bálsamo para el público, alguien con la contención de Martin Luther King en plena era de rebeldÃa y convulsión. Sus pelÃculas mostraron la división estadounidense, pero también las ganas y el deseo de unirse para dejar atrás la confrontación, un mensaje que quedó grabado a fuego en el rostro impávido del actor, imagen de la resistencia y estandarte de la dignidad en unos tiempos donde el cine pedÃa a gritos la figura de un héroe que ejemplificara esa lucha por la igualdad.
Poitier agitó banderas de la equidad en la pantalla grande
Y Poitier no solo aceptó ese rol, sino que agitó las conciencias. “Los negros que aparecÃan en las pelÃculas cuando yo empezaba siempre eran estereotipos negativos: payasos, mayordomos arrastrados, inadaptados… Yo elegà no formar parte de esos tópicos. Quiero que mis hijos se vean reflejados en el cine”, explicaba el intérprete en 1967.
Que Poitier naciese en EE.UU. fue fortuito. Sus padres, ciudadanos de las Bahamas y propietarios de una granja de tomates, viajaron a Miami a vender la cosecha cuando su madre dio a luz de forma prematura. Poitier nació el 20 de febrero de 1927.
Poitier sufre el racismo conscientemente en Estados Unidos
Solo entonces comenzó a comprobar el racismo que existÃa en aquel paÃs que comenzaba a ser su hogar, adonde acudió con un encargo de su madre: “CautÃvalos, hijo. Haz que sean neutrales”. Sin educación, sin apenas dinero pero con la firme determinación de convertirse en artista, Poitier se fue a Nueva York en busca de oportunidades, aunque al principio pasara más tiempo lavando platos que aprendiendo a leer.
En 1945 entró en un programa de educación teatral y, apenas cinco años después, logró su primer papel en una pelÃcula: “No Way Out”, dirigida por un Joseph L. Mankiewicz que se habÃa propuesto rodar pelÃculas que dieron protagonismo a artistas afroamericanos.
Después llegarÃan tÃtulos como “Blackboard Jungle” (1955), “Edge of the City” (1957), “The Defiant Ones” (1958), “A Raisin in the Sun” (1961) o “Pressure Point” (1962), antes de que ganara el Óscar y enlazara las tres pelÃculas que lo solidificaron como un talento trascendente.
Más adelante, en las décadas de 1970 y 1980, se aventuró en la dirección de pelÃculas como “Buck and the Preacher” y “Stir Crazy” -protagonizada por Gene Wilder y Richard Pryor-, aunque siguió apareciendo en obras como “Shoot to Kill”, “Little Nikita”, “Sneakers” y “The Jackal”.
 Su último papel fue en el telefilme “The Last Brickmaker in America”, en 2001, un año antes de que la Academia de Hollywood le entregase el Óscar honorÃfico de manos de Denzel Washington, su gran sucesor en la industria.
Poitier subió al escenario y, tras llevarse la mano al corazón, dijo: “Acepto este premio en recuerdo de todos los actores afroamericanos que lucharon antes que yo en los años difÃciles”, con la misma pose de dignidad y compostura con la que sus más recordados personajes hacÃan frente a la ignorancia y el odio.
Su última aparición pública fue en la 86 edición de los Óscar, en 2014, donde entregó un premio junto a Angelina Jolie; en 2016 fue galardonado con un Bafta honorÃfico.
Fuente : EFE, DW