El Pentágono ha revelado que 109 soldados norteamericanos sufrieron traumatismos craneoencefálicos durante el ataque con misiles de Irán contra dos bases en Irak el 8 de enero, en respuesta a la muerte del general iranà Qassem Suleimani cinco dÃas antes.
Según las últimas cifras de las fuerzas armadas, la mayorÃa de casos fueron leves, y 76 de esos soldados ya están en activo de nuevo. Los sÃntomas de esas dolencias son dolores de cabeza, mareos y náuseas, y pueden demorarse en aparecer, de ahà que se haya atrasado tanto el recuento.
El mes pasado, el presidente Donald Trump restó importancia a esas dolencias, diciendo en un discurso en la Casa Blanca que habÃa oÃdo que los soldados «sufrÃan algún dolor de cabeza y otras cosas parecidas».
Si la Casa Blanca ha preferido restar importancia a estos diagnósticos es porque Trump decidió no responder al ataque, alegando que los daños tras el ataque con misiles de Irán eran únicamente materiales.
En dos ocasiones, Trump ha optado ya por no responder inmediatamente a una agresión iranÃ. Primero, tras el derribo de un ‹dron› o avión no tripulado norteamericano en el golfo Pérsico en junio y después tras el ataque a las bases el mes pasado.
El último informe del Pentágono recogÃa sólo 64 casos de traumatismo craneoencefálico tras los ataques con misiles iranÃes.
Tras el ataque con misiles, los medios estatales de Irán anunciaron que habÃan matado a al menos 80 soldados estadounidenses, algo que el Gobierno estadounidense negó inmediatamente.