Entre los años 2011 y 2015 un total 184,462 peruanos obtuvieron la residencia en Argentina, lo que nos ubica como la tercera nación en ese país con la mayor cantidad de extranjeros con dicho estatus migratorio, después de Paraguay y Bolivia.
De la cifra mencionada, 86,742 peruanos tienen el estatus de residente de forma permanente y 92,720 de manera temporal, detalló el parlamentario andino Mario Zúñiga Martínez. Paraguay y Bolivia tienen 535,856 y 316,410 residencias respectivamente.
“Estas cifras difundidas por la Dirección Nacional de Migraciones de Argentina demuestran que somos una de las colonias de mayor importancia. Según cifras extraoficiales, alrededor de 350 mil peruanos estarían afincados en esta nación. Son personas trabajadoras que realizan labores agrícolas, domésticas y comerciales, entre otras”, indicó Zúñiga.
No obstante, refiere el parlamentario andino peruano, el 30 de enero pasado el presidente Mauricio Macri -a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia- modificó la ley de migraciones argentina para acelerar los procesos de deportación de migrantes con residencia permanente o temporal que tengan procesos penales abiertos, es decir sin haber sido encontrado culpables.
“Esta decisión, que se asemeja a la que Trump viene ejecutando en Estados Unidos, va en contra de las garantías constitucionales y el debido proceso. Se olvida del principio de inocencia, en la práctica significa una condena anticipada. Y significa además que un procesado esté en la misma condición que un condenado”, dijo.
Zúñiga advirtió que bastaría que un migrante tenga una denuncia por un supuesto ilícito, sin derecho a demostrar su inocencia, para ser plausible de una expulsión de la Argentina.
El parlamentario andino peruano manifestó que de un tiempo a esta parte cierto sector político argentino culpa a los migrantes de la crisis económica y lo peor de todo con un discurso que pretende estigmatizar a migrantes de ciertas nacionalidades como sujetos de mal vivir.
Por el contrario, arguyó Zúñiga, las cifras del Ministerio de Justicia de la Argentina dicen otra cosa: de los 71,464 presos que integraban la población carcelaria en la Argentina a fines de 2015, sólo el 6% eran extranjeros.
Y las personas foráneas detenidas por delitos relativos a drogas suman 1,426, lo que representa solo el 0,06% del íntegro de la población migrante y el 2% del total de personas que cumplen pena privativa de libertad por cualquier delito.
“Los migrantes peruanos son gente de reconocida labor y cualidades en todas partes del mundo. El narcotráfico es un delito, un flagelo mundial, en el que incurren personas de todas las nacionalidades. Por favor, no nos estigmatice”, culminó Zúñiga.
