“Sabemos que el último trimestre del año escolar es muy difícil para los chicos porque perciben que las exigencias se incrementan, las tareas no disminuyen, las evaluaciones son más seguidas, y ellos ya no pueden más porque están agotados”, explica Ana Aldazábal, psicóloga de Ediciones Corefo, quien asegura que los padres deben tener en cuenta los siguientes consejos:

• Mostrar flexibilidad frente al inicio para hacer tareas. Eso sí, mucho cuidado con que ese permiso se extienda hasta la hora de acostarse.
• Compensar la dedicación y responsabilidad con algunas salidas o permisos.
• Si antes los chicos debían terminar sus tareas hasta el viernes, ahora se puede dejar que se relajen, visiten a las amistades o las inviten a casa, con el compromiso de hacerlas el día sábado.
• Combinar el repaso tradicional y solitario, buscando videos explicativos que se encuentran en diversas páginas web.
• Planificar actividades para el verano, como talleres, viajes, paseos que le interesen a tu hijo. Será una recompensa con por el esfuerzo, y no será tomado como un condicionante. Cuidado con plantear la idea: “Si no terminas bien el año, entonces te quedas sin Navidad ni vacaciones”. La ideas es cambiar el discurso con: “Sé que estás agotado, yo también lo estoy con tanto trabajo, pero qué te parece si pensamos en lo que vamos a lograr”
• Planifiquen las fiestas Navideñas y el fin de año. Esto entusiasma mucho a los chicos.
• Realice un pequeño cambio en su lugar de estudio. Puede ser: cambio de posición de los muebles, mejorar la iluminación y ventilación, cambiar el color del ambiente… en fin. mucho se puede lograr con un ambiente diferente.
• Graficar en el calendario los días que faltan para terminar. Esto ayudará a visualizar que tan solo faltan pocas semanas.
• Coordinar con los docentes motivadores, así como posibles oportunidades para que los chicos puedan sentir que el esfuerzo está valiendo la pena.