El partido del próximo domingo será en el estadio en el que, hace dos semanas, un tiroteo entre narcos y policías obligó a suspender un encuentro de la primera división del fútbol local.

“Sigue viento en popa el partido contra Brasil. Hay toda una estrategia de seguridad que ha funcionado en el Club Santos. No se contempla modificarlo”, declaró el secretario general de la Federación, Decio de María Serrano.

Un tiroteo ocurrido en las inmediaciones del estadio Corona el pasado 20 de agosto, causó pánico en la cancha y en las tribunas y forzó a sus suspensión luego de que los jugadores se metieron a los vestuarios y los aficionados bajaron al césped.

Por este incidente, no relacionado directamente con el fútbol, se comenzó a especular que el amistoso con Brasil cambiaría de escenario, lo que quedó descartado tras la posición anunciada por la Federación mexicana.