Tras la crisis nuclear de Japón, Italia presentó una modificación de la ley, que suspende definitivamente los preparativos y la búsqueda de lugares para instalar nuevas centrales nucleares con el argumento de que se tiene que investigar de modo cientÃfico la seguridad de la energÃa nuclear.
Si la modificación es aprobada en el Parlamento, ya no tendrá lugar el referéndum previsto para el 12 de junio que los ecologistas querÃan celebrar contra la nueva construcción de centrales.
En un principio, el gobiero del primer ministro Silvio Berlusconi suspendió durante un año los planes para reintroducir la energÃa nuclear tras los graves daños en la de Fukushima por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo pasado.
El gobierno pretendÃa tomarse unos 24 meses para definir mejor su estrategia nuclear, se dijo el 23 de marzo.
Los opositores a la energÃa nuclear lo calificaron de maniobra y aseguraron que el gobierno temÃa perder el referéndum de junio por la catástrofe de Fukushima.
Italia se distanció de la energÃa nuclear en 1987, tras las catástrofe de Chernobyl. Entonces, el 80 por ciento de la población votó en contra de la energÃa atómica.
En 2009, Berlusconi creó la base legal para la reintroducción de ese tipo de energÃa y en 2013 tendrÃa que haber comenzado en Italia la construcción del primer reactor de agua a presión europoeo (EPR), de nueva generación