Una “tormenta perfecta” comenzó a fomarse en el Atlántico y según todas las previsiones azotará mañana sábado a España y su vecino Portugal, informaron instituciones estatales españolas.

El viento robará el protagonismo al agua caído sobre España en los últimos días y ráfagas de hasta 160 kilómetros por hora desatarán la alerta roja en amplias zonas del país y harán pasar un mal fin de semana a todas las regiones españolas, informó DPA.

Los efectos de lo que se conoce coloquialmente como “tormenta perfecta” son similares a los de un ciclón tropical. Su potencia es tal que de hecho recibe también el nombre de “bomba meteorológica”.

“Se unirán una borrasca que está en superficie, de capas bajas, que tiene una energía potente de aire cálido y húmedo, con otra que denominamos vaguada, de niveles altos”, explicó la formación de este fenómeno el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Ángel Rivera.

Juntas darán lugar a “una borrasca muy explosiva”, dijo. La buena noticia es que aunque su virulencia será grande, su ciclo de vida alcanzará como mucho 24 horas, frente a los cinco o seis días que suelen durar las borrascas comunes.

En lenguaje científico, la “tormenta perfecta” que el cineasta Wolfgang Petersen hizo vivir en su film a Clooney y sus compañeros de reparto a bordo de un barco se llama ciclogénesis explosiva.

El norte de España será el área más afectado por este fenómeno meteorológico del que la mayoría de los ciudadanos desconocía su término científico hasta hoy, cuando tertulias de radio y televisión lo colocaron en lugar destacado para desesperación de quienes confiaban en poder pasar el sábado y el domingo unos tranquilos días de asueto.

Mientras los servicios de emergencias se preparaban para la “tormenta perfecta”, ésta iba formándose al oeste de la isla de Madeira, azotada ella misma la semana pasada con unas fuertes lluvias que dejaron inundaciones, riadas y más de 40 muertos.

Pasará por la isla portuguesa y también por las Islas Canarias, pero el momento en el que entre en la Península Ibérica será el de mayor virulencia.

“Se van a dar una serie de fenómenos que normalmente no coinciden, aunque no es la primera vez que pasa”, explicó Rivera. De hecho, en enero del año pasado España sufrió ya las consecuencias de una ciclogénesis explosiva.

Unos años antes, en 1998, la tempestad provocada por este fenómeno se acercó más a lo retratado en el film “La tormenta perfecta” y hundió un pesquero vasco en el mar Cantábrico, matando a sus ocho tripulantes.

Esta vez, en el mar habrá temporal duro o muy duro en las zonas marítimas de Finisterre y en el oeste del Cantábrico, con mar muy gruesa y olas de hasta seis metros.

El nuevo golpe meteorológico sobre el país, que está viviendo un invierno más duro de lo que ha sido la tónica en los últimos años, llega cuando zonas de Andalucía aún no se han recuperado del último temporal, que causó inundaciones y obligó al desalojo de más de 1.500 personas por el desbordamiento del río Guadalquivir.

(FIN) Agencias/JCC