El heptacampeón de Fórmula Uno Michael Schumacher ha renunciado finalmente a sustituir a Felipe Massa y lo que hubiera sido el sensacional retorno del Ãdolo de Ferrari, a sus 40 años, se ha quedado en nada por los estragos que le han dejado en la nuca sus caÃdas de la moto. El motociclismo, ámbito donde se refugió tras retirarse de la competición, en 2006, nunca se le dio bien al teórico mejor piloto de todos los tiempos. A más tardar ahora ha tenido que reconocerlo él mismo al lanzar la toalla. Cuando Alemania entera seguÃa el dÃa a dÃa de sus preparativos y los medios daban asimismo a diario los últimos detalles del casco, el bólido y entrenamientos, a bordo de un Ferrari o de un kart, Schumacher sacudió a sus compatriotas con su renuncia.
“El accidente de motocicleta sufrido en febrero me impide regresar”, ha reconocido Schumacher en un comunicado , respecto a la aparatosa caÃda sufrida el 11 de febrero en unas pruebas sobre dos ruedas, el circuito de Cartagena en España. Fue uno más en los varios accidentes sufridos en una motocicleta, pero al parecer el de mayor relevancia ahora. También España, en el Gran Premio del dÃa 23 en Valencia, iba a ser el escenario de su retorno por la puerta grande y a bordo de un Ferrari -escuderÃa para la que ganó cinco de sus siete tÃtulos mundiales, de 2000 a 2004-, como sustituto de su colega brasileño accidentado. Ayer mismo, según su comunicado, Schumacher informó de su decisión al presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, y al jefe de la escuderÃa, Stefano Domenicale.
La noticia ha sido acogida con desolación en la escuderÃa italiana y ha caÃdo como una losa en Alemania, que habÃa sentido revivir la “fiebre de Schumi”, independientemente de las perspectivas reales de éxito en los circuitos para el héroe. Schumacher ha pedido disculpas a sus seguidores y ha enfatizado que en los dÃas pasados hizo “absolutamente todo lo posible” para estar a punto para el regreso. Simplemente, los dolores en la nuca -desde el primer momento, la gran duda para su retorno, según avanzaron sus médicos y entorno- se han reproducido y no se ve en disposición de superarlos.
Las especulaciones sobre un retorno de Schumacher se desataron inmediatamente después del accidente de Massa y se alimentaron luego tanto desde los ambientes automovilÃsticos como por el propio piloto, que empezó a coquetear con la idea. Primero dio marcha atrás en lo que siempre mantuvo desde que se retiró, que la Fórmula Uno era capÃtulo cerrado, y se puso a disposición de Ferrari, al decir que si se lo pedÃa no podÃa “ignorar” su deber de lealtad con la escuderÃa. Finalmente dio la noticia de que regresaba, se puso inmediatamente a bordo de su viejo Ferrari para entrenar cuando antes, empezó con los ejercicios fÃsicos para sacarse de encima un par de kilitos de más y también con la puesta punto psicológica. Pero el dolor de la nuca reapareció, como catapulta de la mala noticia, a lo que siguió la designación de un nombre menos vistoso para colocarse dentro del Ferrari, el 23 de agosto, en Valencia: el italiano Luca Badoer.