Diez años después del devastador Terremoto de 7.9 grados de magnitud que sacudió la provincia iqueña de Pisco, la Reconstrucción se ha cumplido a un 80 por ciento, sostuvo hoy su alcalde Tomás Andía Cristóstomo.
“(La reconstrucción) no ha sido fácil. Hemos tenido que hacer marchas en la ciudad de Lima, los alcaldes hemos tenido que tomar las pistas para que el Gobierno de turno nos atendiera. Podemos decir que, hoy por hoy, Pisco se encuentra bastante recuperado”, manifestó.
Refirió que el 20% restante por atender responde a cuestiones burocráticas, de instituciones o a una falta de documentación. “En Pisco había un ‘muro de la vergüenza’, que son las paredes construidas donde hay lotes baldíos tras el terremoto. Allí no se puede reconstruir porque esos terrenos no cuentan con títulos de propiedad”, subrayó.
Titulación trunca
Andía Crisóstomo indicó que en las zonas periféricas, donde se han producido ocupaciones informales posteriormente al terremoto, el Cofopri no pudo avanzar con la prescripción adquisitiva y los documentos para poder titular.
“Otro tema que es álgido tiene que ver con la zona de la playa, en el barrio de Leticia, en la Av. Manuel Pardo, donde hace poco terminamos con el trabajo de agua, desagüe y pistas. Sin embargo, la población no ha podido acceder al programa Techo Propio. A tal punto que todavía vive en módulos de madera, quincha o esteras. No pueden acceder a Techo Propio porque esa zona es considerada por técnicos del Indeci como una zona de ‘terreno licuado’, que no es apta para vivienda”, comentó.
También dio a conocer que el Palacio Municipal no ha podido ser reconstruido hasta ahora, y lo mismo ocurre con un sector de la Plaza de Armas, debido a que existen problemas con el Ministerio de Cultura que “no nos autoriza ninguna intervención por tratarse de un predio histórico”, subrayó.
“Felizmente, en febrero de este año nos han dado el pase para que el proyecto de la Plaza de Armas que se ha presentado ante el Ministerio de Cultura pueda obtener la viabilidad. Con esto, el expediente se encuentra en el presupuesto municipal del 2018 para las obras correspondientes. Este año vamos a comenzar la construcción del nuevo Palacio Municipal en un terreno donado por la empresa privada”, anotó.
Otra obra a la espera de reconstrucción es el Instituto Superior Tecnológico Jorge Medrano Vásquez, cuyos alumnos están estudiando en módulos provisionales y hay pabellones por demoler, refirió.
Algo similar ocurre con la filial de la Universidad Nacional San Luis Gonzaga en Pisco, donde los estudiantes siguen llevando clases en espacios colapsados. “Hay aulas construidas en el distrito de Túpac Amaru, pero lucen abandonadas hace más de cinco años debido a desavenencias entre las autoridades de esa universidad y la empresa encargada de la construcción”, afirmó.
Andía Crisóstomo destacó que en los últimos diez años se ha avanzado en obras de agua y saneamiento, pistas y veredas, y se ha reconstruido colegios, entre otras obras que cuentan con el apoyo de la población.
En ese sentido, contó que cuando era alcalde distrital de Túpac Amaru, agilizó un proyecto de vivienda social que adjudicó a los damnificados el terreno al costo de un sol el metro cuadrado y con facilidades de pago.
“Hoy por hoy, el distrito de Túpac Amaru cuenta con cobertura al 100% en los servicios de agua potable y alcantarillado, así como electricidad; y 55% en pistas y veredas. La población tomó conciencia de su rol en la reconstrucción y de manera organizada desplegó sus esfuerzos para superar esta tragedia con el apoyo de las autoridades”, enfatizó.
El terremoto ocurrido hace una década, se registró a las 18:41 horas y alcanzó los 7.9 grados de magnitud. La devastación dejó un trágico saldo de 596 muertos, más de 2,200 heridos y 432,000 damnificados.