Ministro Gonzalo Tamayo sostuvo que es la única forma de darle viabilidad financiera al proyecto, luego que el Congreso anulara la subvención que pagaban todos los peruanos en sus recibos de luz (Red de GarantÃa Principal)
Para que el Gasoducto Sur Peruano (GSP) pueda ser concluido se deberá convertir en una obra tipo Asociación Público – Privada (APP). Solo asà garantizará su viabilidad financiera y, por ende, también la relicitación de la obra en el primer trimestre de 2018.
El ministro de EnergÃa y Minas, Gonzalo Tamayo, explicó que el Estado peruano tendrá que cofinanciar el proyecto gasÃfero, luego que el Congreso anulara la subvención (Red de GarantÃa Principal) que pagaban todos los peruanos en los recibos de luz.
“Habrá cofinanciamiento del gasoducto. ¿Por qué? recuerden que el ducto estaba financiado con un cargo a las tarifas eléctricas que todos pagábamos. El Congreso eliminó esa medida… Ahora tenemos que buscar alguna herramienta que asegure el financiamiento del gasoducto. En el Estado la única otra herramienta que tenemos es recurrir a un esquema de cofinanciamiento”, anotó.
De esa forma, con la aprobación de una partida presupuestal por el Ministerio de EconomÃa y Finanzas (MEF) se hará viable el proyecto desde el punto de vista financiero. Por el momento no se ha definido cuánto tendrá que aportar el Estado peruano.
Para hacer esos cambios se ha dispuesto la creación de un Comité Especial en la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Proinversión). Ese grupo tendrá tres miembros – que serán designados antes de este fin de semana – y estará a cargo de definir con claridad el monto de cofinanciamiento.
El Comité Especial también definirá si es conveniente cambiar el esquema del gasoducto y si amerita modificar el costo del GSP.
En el modelo elaborado por el consorcio Gasoducto Sur Peruano (Enagás, Graña y Montero y Odebrecht) solo se asegura el ducto principal de más de 1000 kilómetros entre la selva de Cusco e Ilo (Moquegua) y los ramales a La Convención y Cusco. No considera tuberÃas a las otras regiones; estas deben ser licitadas en forma independiente.
De igual forma, el precio del proyecto es de 7 mil 324 millones de dólares. El congresista Armando Villanueva consideró que se debe “sincerar ese precio, porque es muy elevado”.
El megaproyecto gasÃfero fue concebido para traer el gas de Camisea a las regiones de Cusco, Arequipa Tacna y Moquegua. Hasta mediados de 2016, cuando se frenó la obra, el concesionario habÃa conseguido un avance del 35%. Actualmente, las tuberÃas que fueron tendidas están empezando a oxidarse por falta de cuidado.