El Aeropuerto Internacional de Chinchero (Cusco), cuya construcción culminará en el año 2021, tendrá vuelos directos desde el Cusco a Chile, Argentina, Brasil, Ecuador, Paraguay y Panamá, sostuvo el viceministro de Turismo, Rogers Valencia.
“Con Chinchero se quiere volar al norte de Chile, al norte de Argentina, al interior del Brasil, a las ciudades de Iguazú, Cuiabá, Manaos”, manifestó Valencia al Diario Oficial El Peruano.
El viceministro también señaló que buscará promover vuelos de Cusco a Guayaquil (Ecuador), Paraguay, Panamá y otros destinos selectos, con lo cual el terminal aéreo de Chinchero será un complementario al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
“Además, no solo queremos dinamizar el transporte aéreo en el sur del país, sino que Chinchero le dará al Perú la oportunidad de conectarse intrarregionalmente (entre provincias)”, afirmó.
El Aeropuerto Internacional de Chinchero en Cusco, tendrá una capacidad para movilizar seis millones de pasajeros al año, a diferencia de los 2.5 millones que se trasladan actualmente en el aeropuerto Alejandro Velasco Astete.
Gracias al desarrollo de este proyecto se afianzará la imagen del Cusco como región turística y cultural.
Asimismo, se convertirá en una fuente de crecimiento local, ya que durante su etapa de construcción se crearán más de 2,500 puestos de trabajo directo a los pobladores de la zona en las fases de edificación y operación.
Se priorizará la contratación de la mano de obra local de las comunidades cusqueñas para la construcción de las instalaciones del nuevo aeropuerto.
Este nuevo aeropuerto destacará además por su gran envergadura. Se destinarán 40,000 metros cuadrados para el terminal de pasajeros, cuyo diseño será amigable con el paisaje andino del distrito de Chinchero.
El nuevo terminal de Chinchero facilitará una mayor exportación de productos andinos al resto del mundo y se harán realidad las conexiones aéreas directas con Chile, Brasil, Paraguay y Bolivia.
Disminuirán los costos de los vuelos, ya que no será necesario hacer escala en Lima y los paquetes turísticos a Machu Picchu tendrán mayor alcance.
En el primer año de funcionamiento, la Ciudad Imperial recibirá –por concepto de ingresos aeroportuarios– hasta 100 millones de dólares.