Martes, 23 de Abril del 2024
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BELLEZA CON ARTE HISTRIONICO

Publicado el 26/01/13

No basta tener cara bonita para impactar en el gusto de todo público. Suma también en el éxito del artista, el carisma que expone dentro y fuera de los escenarios. Este es el caso de la actriz peruana Daniela Sarfaty, que recientemente cosechó popularidad haciendo el papel de “Susú”, la “pituca” indiferente, en la sintonizada serie “Al fondo hay sitio”. Ella, con su habitual sencillez, compartió que hay detrás de su trabajo profesional.

-Daniela, ¿cuánto significa este personaje en tu trayectoria artística?

“Ufff, mucho porque me permitió mostrarme en doble esfuerzo. Imitar a una amiga “pink lady” que no vive su realidad. Además fue muy graciosa, la locuaz “Susú Ferrand”. Creo que la gente se divirtió.”

-¿Por qué crees que “Al fondo hay sitio” tuvo tanto éxito?

“Hay varios factores, entre ellos el excelente grupo de producción y libretistas, que supieron formar un notable grupo de artistas y trabajar como una verdadera familia. Nadie se sintió estrella. Igualmente se logró recrear con oportunos argumentos las diferentes vivencias entre familias.”

-Con tanta popularidad me imagino que te han propuesto incursionar en la política.

“Ja,ja,ja. No tanto, este asunto no pasa por mi mente. La política es un tema de servicio y hay que estar bien preparado.”

-¿Dónde te ubicas mejor o agrada trabajar más?

“Sin duda, siempre pongo todo de mi en cada secuencia. Hacer teatro, cine o incursionar en televisión son escenarios distintos para mí. Pero, siento algo más cuando estoy en las tablas, quizás porque estoy más cerca a la gente. Así lo viví por ejemplo en la obra “El celular de un muerto”.

-Tus logros no son de ahora, ¿cómo lo tomas?

“Con satisfacción personal y perfil bajo. Desde “Malicia”, trabajando en “Torbellino”, incluso en la telenovela “Girasoles para Lucia”.Tengo gratos recuerdos, aunque fue breve mi participación en la película “No se lo digas a nadie” de Pancho Lombardi.”

-Daniela, ¿y tu paso por “Nubeluz”?

“Ahhh. Inolvidable y felicidad. Ser cíndela y nubelina me permitió crecer en muchos aspectos de mi vida, sobre todo llenar de alegría y de ayuda a los niños. Son etapas que una nunca olvida.”

Razón tiene Daniela Sarfaty guardar con cariño sus primeros pasos en el maravilloso mundo del espectáculo. Cantando con su banda OIM en las lindas noches de la “Estación de Barranco”.

-¿Cuál es tu opinión de los conflictos de las parejas jóvenes en el círculo televisivo?

“De ese tema no hablo. Cada uno sabe como llevar su relación y no exponerse tanto en los distintos medios. Yo tengo mi receta y al menos me va bien. La prioridad es el hogar, la atención y el cariño a mi hijo Facundo.”

Así es Daniela Sarfaty, que no se guarda nada para decir lo que piensa en su acertada carrera histriónica. Por eso, siempre hay sitio para ella, cuando se hable de personajes que hacen historia en nuestro medio.

Por Marcos Mendoza

 



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