Jueves, 25 de Abril del 2024 
A pocas horas de celebrarse el Año Nuevo, la ciudad de Lima luce “adornada” de diversos objetos de color amarillo, como guirnaldas, cadenetas, flores, lentes, piñatas, cotillón y prendas de vestir que el público puede comprar según su preferencia para recibir con alegría y ánimo festivo la llegada del 2011.
En los mercados de flores, por ejemplo, la oferta de margaritas, claveles, gladiolos, crisantemos, entre otras especies de color amarillo, tienen gran demanda no solo como decoración en las casas, sino también porque son utilizadas para los “baños de florecimiento” que, según la tradición, atraen la buena suerte para que se cumplan los deseos en el nuevo año.
Quienes celebrarán con una gran fiesta la bienvenida al Año Nuevo hay toda una gama de objetos elaborados para ello, como los lentes con forma del número 2011, así como las guirnaldas, cadenetas, silbatos, cotillón y confites de color amarillo que se arrojan al aire para que, al caer sobre las personas que participan en la reunión, les traiga buena fortuna.
Y para quienes desean “castigar” al personaje más criticado del año que se va, hay una variedad de piñatas elaboradas con la imagen de personajes vinculados al mundo de la política, el deporte o el ambiente artístico, a través de los cuales se canalizará el descontento popular.
La vestimenta ocupa un lugar preferencial en esta última celebración del año y para ello existe una vasta oferta de prendas de uso interior como trusas, brasieres, polos y bividís, así como de uso externo, como ternos, camisas y vestidos de este tradicional color al que se le simboliza como expresión de buena suerte.
