Diseñada y fabricada por Hydronalix, EMILY es una boya de alta tecnología que tiene como función ayudar a nadadores en problemas mucho más rápido de lo que lo haría una persona.
Es controlada por control remoto y gracias a su motor alcanza velocidades de hasta 40 km/h. Además tiene un impulsor que chupa el agua del frente y la lanza hacia atrás.
Cuando EMILY llega junto al nadador en problemas, una persona se comunica mediante una cámara y un sistema de radio incorporados en la boya. Pesa 11 kg y cada una cuesta $3.500 dólares.