El presidente colombiano realizó un balance de sus primeros cien días de gobierno y renovó su compromiso de liberar a todos los rehénes de las FARC. Además, afirmó que su país quiere ser “más proactivo en los escenarios regionales”.
Tras recordar el éxito de los operativos militares de rescate Jaque (2008) y Camaleón (2010), con los que quedaron en libertad 19 personas, Santos envió un mensaje a quienes permanecen cautivos. “A los secuestrados el mensaje que les hemos enviado siempre: no vamos a descansar hasta verlos libres. En eso tengan la seguridad de que todos los días estamos haciendo todos los esfuerzos que tenemos a nuestro alcance”, señaló.
El mandatario celebró, además, los golpes que las fuerzas de seguridad contra los rebeldes y confesó que el 23 de septiembre pasado cuando le informaron que había sido abatido el jefe de las FARC, Jorge Briceño, alias Mono Jojoy, fue el día que mayor satisfacción le causó desde que asumió, el 7 de agosto.
Santos afirmó que ese tipo de operaciones permitieron que los indicadores en materia de resultados contra el delito hayan mejorado por lo que destacó “la capacidad que las Fuerzas Armadas colombianas“. “Ya países de la región nos han venido solicitando ayuda para enfrentar el flagelo del secuestro, que no es exclusivamente colombiano, y que aquí hemos podido reducir sustancialmente“, añadió.
En cuanto a Ecuador, país que rompió lazos con Colombia en marzo de 2008, indicó que su objetivo, compartido por el presidente Rafael Correa, “es restablecer las relaciones a la mayor brevedad posible“. “Ojalá tengamos lo más pronto posible relaciones a nivel de embajadores”, subrayó.
Por último, Santos se refirió a la reciente cumbre del G-20 en Corea del Sur y lamentó que haya finalizado sin soluciones para los países emergentes.“Las políticas monetarias internacionales nos afectan. El G20 se reunió y no salió ninguna solución a los problemas que nos afectan a todos los países emergentes”, señaló.