Charlie Sheen y Brooke Mueller parecían mantener una relación normal hasta el pasado diciembre, cuando un incidente puso en evidencia todos los problemas de la pareja; que desde entonces no ha conseguido reconciliarse.
Primero fue la supuesta agresión con arma blanca que Brooke dijo haber sufrido a manos de Charlie. Tras ello, un peregrinaje por clínicas de rehabilitación y el destape de las infidelidades del actor con prostitutas de lujo consiguieron empeorar aún más la situación.
Pero ellos no han perdido la esperanza, y aunque han decidido residir en casas distintas para evitar que sus peleas vayan a más, siguen creyendo en su matrimonio y han difundido un comunicado para hacer saber que piensan seguir luchando juntos.
“Por favor, dejadnos aclarar esto: no están preparando el divorcio, ni ha sido contemplado”, se lee en la nota distribuida, que ha sido firmada conjuntamente por el abogado de Brooke, Yale Galanter, y el productor de Dos hombres y medio, Mark Burg.