La orden del magistrado, Derrick K. Watson, con sede en Honolulu (Hawái), deja por el momento sin efecto la medida con la que Trump pretendÃa suspender la entrada al paÃs de inmigrantes de seis paÃses de mayorÃa musulmana y de todos los refugiados.
La decisión de Watson supone un segundo revés legal para el Gobierno de Trump, que ya vio como la Justicia bloqueaba a principios de febrero su primer veto.
Watson indicó en su fallo, válido en todo Estados Unidos, que la medida causarÃa “daños irreparables”.
Tras una breve pero infructuosa batalla legal, Trump presentó el 6 de marzo una versión revisada del veto, en la que introdujo algunos cambios rebajando el tono de la medida con el convencimiento de que esta vez evitarÃa el escrutinio judicial.
Sin embargo, Watson optó por volverla a bloquear a instancias de una demanda interpuesta por el fiscal general del estado de Hawái, el demócrata Doug Chin, quien alegó que el nuevo veto es, como el primero, inconstitucional.
La de Watson era una de las tres cortes que estudiaban hoy el futuro de la orden presidencial, con otras dos audiencias pendientes en tribunales de Maryland y del estado de Washington, este último el mismo que bloqueó el primer veto.
El nuevo veto migratorio suspendÃa durante 120 dÃas el programa de acogida a refugiados y durante 90 la entrada de ciudadanos procedentes de Irán, Somalia, Sudán, Siria, Yemen y Libia.
El fallo judicial evita que el decreto presidencial entre en vigor el jueves.
A diferencia de la primera orden, la medida dejaba fuera a los ciudadanos de Iraq y modifica la provisión sobre los refugiados sirios, que tendrán prohibida su entrada al paÃs durante 120 dÃas y no de manera indefinida, como establecÃa el veto original.
Fuente: EFE