Las Fuerzas Armadas sirias anunciaron este lunes el fin de la tregua iniciada hace una semana por Estados Unidos y Rusia, tras lo cual comenzaron los bombardeos en los barrios controlados por los rebeldes en Alepo.
En un comunicado difundido por la agencia de prensa siria SANA, Damasco anunció el fin de la tregua y acusó a los grupos rebeldes “de no respetar ninguna de las disposiciones” del acuerdo.
“El Ejército sirio anuncia el fin de la suspensión de los combates que empezó a las 19H00 (16H00 GMT) del 12 de septiembre de 2016 en virtud del acuerdo rusoestadounidense”, indicó el comunicado, una hora antes de que expirara el plazo inicial.
Unas dos horas después, comenzaron los bombardeos en Alepo.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres, reportó por su parte que caÃan bombas en varias zonas de la ciudad, pero informó de que no se podÃa determinar el origen de los bombardeos.
Los ministros de Exteriores del Grupo Internacional de Apoyo a Siria, incluyendo Estados Unidos y Rusia, se reunirán el martes en Nueva York, para analizar la situación.
La tregua respaldada por Rusia y Estados Unidos, tenÃa por ambición poner fin a un conflicto en el que han muerto más de 300.000 personas desde 2011.
“Se suponÃa que la tregua debÃa ser una verdadera oportunidad para terminar con este baño de sangre, pero los grupos terroristas armados incumplieron este acuerdo”, indicó Damasco en un comunicado.
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que negoció el acuerdo con su contraparte rusa, Serguei Lavrov, afirmó que Rusia falló en cumplir con su parte de la tregua, pero que Washington está dispuesta a continuar trabajando en ella.
Según los términos del acuerdo, si el cese al fuego se mantenÃa, Estados Unidos debÃa crear una célula militar con Moscú para atacar a los grupos yihadistas que operan en Siria.
Poco antes, Kerry habÃa insistido en que el cese al fuego se mantenÃa “pero que es frágil”.
El ministerio de Defensa ruso ya habÃa aguado las esperanzas de que la tregua se prolongara más allá de este lunes por la noche.
El general ruso Serguei Rudskoi estimó que “considerando que las condiciones del alto el fuego no están siendo respetadas por los rebeldes, consideramos que no tiene sentido para las fuerzas del gobierno sirio respetarla de forma unilateral”.
Añadió que “el principal punto” es que los rebeldes no se separaron en el terreno del grupo yihadista Frente Fateh al Sham.
En total, en una semana de tregua, 27 civiles, entre ellos 9 niños, murieron, según el OSDH.
El peor dÃa para los civiles fue el domingo, cuando un barril de explosivos estalló en un ataque del ejército sirio causando 10 muertos en una localidad rebelde del sur. Ese dÃa una mujer murió en un ataque aéreo en Alepo.
– ‘Una agresión flagrante’ –
La tregua pendÃa de un hilo después de que la coalición liderada por Estados Unidos bombardeara el sábado una colina controlada por el ejército sirio en Deir Ezor (este), en donde las tropas de Damasco combaten al grupo yihadista Estado Islámico.
El presidente sirio, Bashar al Asad, acusó este lunes a Washington de haber cometido una “agresión flagrante“.
Una consejera del presidente sirio, Buthaina Shaaban, dijo el domingo a AFP que Damasco considera que “este ataque fue deliberado. Todo era premeditado”.
Aprovechando este ataque los yihadistas lograron tomar la colina Thurda, que domina el aeropuerto de Deir Ezor controlado por el régimen, según una fuente militar. Con esta posición los yihadistas pueden impedir los movimientos de aviones y helicópteros.
Uno de los principales objetivos de la tregua era permitir la llegada de ayuda humanitaria a una de las regiones más necesitadas. Este lunes, la entrega se hacÃa a cuentagotas.
Este lunes, según David Swanson, un portavoz de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), la ayuda logró llegar a dos regiones de difÃcil acceso.
La ayuda fue distribuida a decenas de miles de personas en Talbisé, una ciudad rebelde en la provincia de Homs.
Otra caravana debe dirigirse a Orum al Kubra, una localidad en el oeste de la provincia de Alepo, en donde viven 78.000 personas, para distribuir ayuda, pero los convoyes destinados a los barrios de Alepo controlados por los rebeldes continúan detenidos en la frontera con TurquÃa.
(FIN) AFP / RFA
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