Martes, 23 de Abril del 2024 
José Luis Patiño, gerente de Usuarios de la Superintendencia Nacional de Servicios y Saneamiento (Sunass), destacó el grave problema de gastar tanta agua en las piscinas.
Señaló que para llenar una piscina doméstica común de las que se instalan en las calles se pueden requerir hasta tres metros cúbicos de agua, es decir, aproximadamente 3.300 litros.
Ello supone que, en un solo fin de semana, se gastaría un quinto del consumo mensual de una familia de cuatro miembros y en un mes se puede casi duplicar el consumo regular.
Según esta entidad, febrero es el mes en el que más agua se consume en Lima.
Patiño subrayó que el uso indiscriminado del agua es grave porque se da en una ciudad en la que hay, al menos, un millón de personas que no cuentan con el servicio de agua potable. Además, contextualiza esto en otra cifra: un 22% del servicio en Lima es discontinuo.
“Ya pagaré a fin de mes la cuenta”, dijo Francisco Meiggs Tizón, un vecino del jirón Centro Escolar en Barrios Altos, cuando se le preguntó por el posible consumo de agua excesivo.
Estaba sentado fuera de la casa de su madre viendo a sus nietos entrar a una piscina que llenaron con una manguera conectada a un caño dentro de la casa. Su madre dijo que al menos así uno está más tranquilo, con los niños cerca, sin tirar globos ni mojar a nadie.
