Bangkok, may. 12. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) pidió hoy a los paÃses del sudeste asiático que rescaten a miles de migrantes cuyas vidas corren peligro al temerse que están a la deriva en el mar.
“Se necesita un esfuerzo regional (…) nosotros no tenemos la capacidad para buscarlos, pero los gobiernos si, tienen barcos y satélites”, dijo el portavoz de la OIM Joe Lowry, quien agregó que los migrantes están en muy malas condiciones, y que algunos incluso podrÃan estar muertos.
Según la organización en el mar podrÃa haber cerca de 8.000 personas a la deriva, muchos de ellos provenientes de Bangladesh y de Birmania, con cada vez menos comida y agua.
Este llamado se produce después de que las autoridades de Indonesia anunciaran que habÃan remolcado fuera de sus aguas territoriales a una embarcación con cerca de 400 inmigrantes que habÃa llegado el lunes a sus costas.
“Los traficantes tienen a las personas cautivas en el mar porque tienen miedo de acercarse a las costas. Parece que los contrabandistas abandonaron a la gente en el mar. Puede que estén allà desde hace semanas, incluso meses”, dijo a la AFP Vivian Tan, representante del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados en Bangkok.
En los últimos dÃas, unos 2.000 migrantes han sido rescatados en las costas de Indonesia y Malasia, la mayorÃa de ellos musulmanes rohingyas, un grupo considerado por la ONU como una de las minorÃas más perseguidas de todo el mundo.
Birmania, un paÃs de mayorÃa budista, considera a los cerca de 1,3 millones de rohingyas de su territorio como inmigrantes ilegales de Bangladesh, y en muchas ocasiones esta población ha sido perseguida y obligada a huir.
Estos migrantes parecen ser vÃctimas involuntarias de una nueva polÃtica aplicada por Tailandia, cuyo gobierno tomó medidas contra los traficantes de migrantes, tras el hallazgo este mes de decenas de restos en fosas comunes en el sur del paÃs.
Mientras, Tailandia confirmó que será sede el 29 de mayo de una cumbre regional sobre el enorme flujo de inmigración clandestina, en momentos en que el sudeste asiático se enfrenta a una crisis migratoria “sin precedentes”.
“La cumbre extraordinaria es un llamado urgente para que los paÃses de la región trabajen juntos para responder al aumento sin precedentes de la inmigración irregular”, indicó el ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.