Londres, dic. 17 . La PolicÃa Metropolitana de Londres afirmó que no hay “pruebas creÃbles” sobre la participación del Ejército en la muerte de la princesa Diana de Gales, determinando que no hay motivos para reabrir la investigación sobre su muerte, informó la cadena de televisión británica Sky News.
“Pese a que existe la posibilidad de que dichos comentarios sobre la responsabilidad del SAS (Servicio Aéreo Especial, regimiento de fuerzas especiales del Ejército británico) en la muerte se hayan pronunciado, no hay pruebas creÃbles o relevantes para apoyar la teorÃa de que dichas afirmaciones tengan una base real”, dijo el comisario Mark Rowley, en una carta obtenida por la cadena.
“Habiendo revisado el proceso y sus conclusiones, estoy seguro de que no hay base sobre la que reabrir una investigación por homicidio criminal o por la que reenviar el asunto al juez de primera instancia”, añadió.
“En base a esta información, he escrito a la Casa Real y a Lord Baker (en referencia a sir Thomas Scott Baker, juez del Tribunal de Apelaciones) para informarles de lo anteriormente dicho y para facilitarles una copia del resumen final”, ha remachado.
Las investigaciones en torno al papel del SAS en el accidente de tráfico ocurrido el 31 de agosto de 1997 en ParÃs en el que fallecieron Lady Di, su amigo Dodi al Fayed y el conductor del vehÃculo en el que viajaban, Henri Paul, se abrieron después de que la PolicÃa recibiera información sobre la presunta participación del SAS en el suceso.
Durante los últimos tres meses, un equipo de siete detectives ha investigado la veracidad de dichas acusaciones con la colaboración de la PolicÃa de West Midlands, West Mercia y Dyfed Powys, asà como de la PolÃcia Militar Real y el Ministerio de Defensa.
En sus conclusiones, la PolicÃa Metropolitana determinó que existen contradicciones sobre lo que las presuntas fuentes dijeron o no dijeron al respecto. “No es posible demostrar de forma concluyente lo que fue o no fue dicho”, resaltó.
“Sin embargo, está muy claro que, debido a la extraordinaria publicidad y conjeturas que siguieron a las muertes y las investigaciones, hubo quienes, por la motivación que sea, intentaron demostrar un determinado conocimiento sobre el suceso para reclamar algún tipo de reconocimiento”, refirió.
La investigación judicial, finalizada en 2008 tras escuchar los testimonios de alrededor de 250 testigos, determinó que Paul habÃa llevado a cabo una conducción temeraria que provocó el accidente.
En el momento del suceso, el vehÃculo en el que viajaban Lady Di y Al Fayed intentaba alejarse de un grupo de periodistas y fotógrafos que intentaban retratar a la pareja a su salida del hotel Ritz de la capital francesa.
El padre de Al Fayed, Mohamed al Fayed, antiguo propietario de las tiendas Harrods, aseguró en 2008 que ponÃa fin a su campaña para intentar demostrar que el suceso tuvo lugar bajo las órdenes de las autoridades británicas para favorecer a los hijos de la princesa de Gales, William y Harry.
El fallecimiento de Lady Di, que se divorció en 1996 del heredero al trono británico, el prÃncipe Carlos, desató una respuesta pública de dolor que quedó retratada en los miles de personas que acudieron a su funeral, celebrado en Londres.