Cuando salió el film El cisne negro , Natalie Portman cosechó halagos por doquier respecto de su capacidad para el baile. Su interpretación de una bailarina de ballet le valió, de hecho, su primer Oscar como mejor actriz. Sin embargo, no todo era tan fantástico: según la doble de la actriz, Portman realizó sólo “el 5 por ciento” de las escenas de baile.
Las declaraciones de la bailarina tienen un disparador. La semana pasada, la pareja de Natalie, y coreógrafo de El cisne negro, Benjamin Millipied, dijo que el “85 por ciento de esa pelÃcula es Natalie”.
Enfurecida, la bailarina continuó con su descargo: “Eso degrada a la profesión, no sólo a mi. Yo hago esto hace 22 años… ¿Podés convertirte en un concertista de piano en un año y medio incluso si sos una estrella de cine?”. Sin embargo, Lane supo ponderar que “en un año y medio perdió mucho peso y realmente trató de entender el método y entrar en una cabeza de un bailarÃn profesional y sentirse como ellos”.
