Declarada prioridad nacional, la nueva polÃtica turÃstica del gobierno se ha fijado como metas para el 2018 la recepción de 50 millones de visitantes, un ingreso anual de 40.000 millones de dólares y la generación de cuatro millones adicionales de empleos directos y 12 millones de indirectos.
“Nuestro paÃs tiene una clara vocación turÃstica. Eso le ha permitido ubicarse entre los principales destinos del mundo. Sin embargo, estamos lejos todavÃa de desplegar todo nuestro potencial”, dijo Calderón esta semana durante la firma de un Acuerdo Nacional por el Turismo.
Según la Organización Mundial de Turismo (OMT), México recibe un promedio de 22,6 millones de turistas y un ingreso anual de 11.800 millones de dólares, que constituyen -según la secretaria de Turismo, Gloria Guevara– la tercera fuente de divisas del paÃs y generan 7,5 millones de empleos directos. México ocupa el décimo lugar entre los destinos turÃsticos del mundo.
La temporada del “spring-break”, que abarca los meses de febrero y marzo, representa un fuerte ingreso para los hoteleros mexicanos, que ven cubierta su ocupación en esta época del año hasta en un 80 por ciento.
Según datos de la secretarÃa de Turismo de Guerrero, estado donde está ubicado Acapulco, el balneario recibió en 2009 un total de 18.000 visitantes, cifra que cayó a 9.000 en 2010. Para este año sólo tiene 1.000 reservas.
No existen cifras sobre las pérdidas económicas. El gobierno tampoco admite que la violencia esté afectando significativamente al flujo total de visitantes, aunque la secretaria Gloria Guevara aceptó que, en definitiva, al turismo le afecta “absolutamente todo”, desde los efectos climáticos hasta la inseguridad.
