Cada año, jóvenes profesionales comprometidos con la conservación, provenientes de diferentes carreras como turismo, negocios, biología, ingeniería, entre otras, tienen la oportunidad de participar activamente como guardaparques voluntarios en la Reserva Nacional de Paracas, con la finalidad de contribuir al fortalecimiento de la gestión del ANP colaborando en las acciones de conservación y gestión turística que se realizan para cumplir con los objetivos de la creación del área.

Durante este verano del 2011, el “XX Programa de Guardaparques Voluntarios de la Reserva Nacional de Paracas” convocó a 15 jóvenes entre hombres y mujeres quienes, en primera instancia, fueron capacitados en temas de conservación como el manejo sostenible de recursos naturales en ANP, monitoreo de su biodiversidad, pesca artesanal y turismo; todo ello con la colaboración de reconocidos profesionales de instituciones públicas, privadas y ONGs.

Una vez capacitados, los voluntarios se incorporaron al trabajo de los guardaparques oficiales en las labores de control y vigilancia, monitoreo biológico,  gestión turística, investigación,  educación ambiental, recuperación de la orilla marina y atención al turista, llegando a ganar una valiosa experiencia vivida directamente en la reserva, ícono de la riqueza marino costera del Perú.

El grupo de voluntarios también pudo participar en el diagnóstico de las actividades de colecta y extracción, en el monitoreo de la mortalidad de la fauna y colaborando en la elaboración del estudio “Sensibilidad ecológica de la bahía de Paracas”, en coordinación con la ONG Ecoplayas.

Una de las experiencias que valoraron más durante su programa de voluntariado fueron las salidas a campo para reconocer la reserva y evaluar su fauna; recorrieron lugares poco accesibles y de gran belleza paisajística como la península de Paracas, donde pudieron divisar las principales colonias de lobo marino fino, pingüino de Humboldt, y vegetación de lomas; las islas San Gallán, donde vieron el principal apostadero de lobo marino chusco; las emblemáticas islas ballestas; y el Morro Quemado, que por su difícil acceso conserva en estado natural una de las principales zonas para la reproducción del lobo marino chusco, llegándose a contabilizar más de 35,000 individuos.

De esta manera, el próximo 20 de marzo la XX promoción de guardaparques voluntarios de la Reserva Nacional de Paracas culminará con éxito dicho programa; con ello habrán ganado fortalecer sus capacidades para complementar sus profesiones, tener una óptica diferente con relación a las dificultades que pueden tener las áreas naturales protegidas, así como su involucramiento de manera vivencial con la conservación y el manejo sostenible de los recursos naturales en beneficio de la población.

Cabe resaltar, que esta iniciativa se lleva a cabo gracias a un convenio suscrito entre el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado-SERNANP, y el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo-MINCETUR.