Los limeños sintieron ayer y anteayer los dÃas más frÃos del invierno con temperaturas mÃnimas de hasta 12 grados Celsius y la sensación térmica “matará de frÃo”, pues los termómetros marcarán en breve entre ocho y nueve grados Celsius en pleno centro de Lima y, peor, en los cerros aledaños.
Con la llegada del fenómeno de La Niña, que se caracteriza por traer temperaturas más bajas y perdurables, el frÃo se sentirá hasta en los huesos.
“Estamos sintiendo el invierno más frÃo. Las lloviznas se seguirán dando en toda la estación y el cielo cubierto persistirá en Lima. La humedad ya llegó al cien por ciento en varias zonas de la capital, como Ticlio Chico”, puntualizó la experta del Senamhi, Sara Olivares.
Agregó que el lunes último se registró en el Campo de Marte el dÃa más frÃo de invierno con 12,8 grados Celsius y resaltó que la sensación térmica (de frÃo en el ambiente) variará la temperatura hasta en tres grados menos. Es decir, en los próximos dÃas los limeños se congelarán al sentir temperaturas mÃnimas de hasta ocho y siete grados.
Ni los distritos más cálidos, ubicados en Lima-este como Chosica, Ate- Vitarte (Huaycán) y Santa Anita, se salvan de la ola de frÃo que azota nuestra capital. Afirmaciones como las del ingeniero del Senamhi Félix Cubas, quien manifestó que nuestra capital está experimentando el frÃo más gélido de los últimos 40 años, se ajustan a la realidad, aludiendo a los 8,8 grados Celsius registrados hace dÃas en La Molina.
El meteorólogo del Senamhi agregó que la temperatura más baja de Lima (diez grados Celsius) se registra todos los dÃas en Ticlio Chico, en Villa MarÃa del Triunfo, seguido de Chosica con once grados. Paradójicamente, sostuvo que los distritos más cercanos al mar como San Miguel y Miraflores registran temperaturas inusitadas que oscilan entre 14 y 18 grados Celsius.
Asimismo, anotó que este fenómeno ecuatorial, que está en un proceso de desarrollo, podrÃa variar la temperatura local hasta un grado más. Esto originarÃa que la sensación térmica siga disminuyendo. En efecto, este fenómeno originarÃa prolongadas e inusuales lloviznas como la que inundó ayer las calles capitalinas.
Por ello, los limeños saltaron a las calles enfundados con gorras, chompas, chalinas e incluso ponchos y paraguas.
“No da ganas de salir de la cama y a planchazos tenemos que secar la ropa que no seca en el cordel. Para colmo nos agarra la llovizna”, indicó Jorge López en un paradero de la avenida Tacna.
Incluso el domingo, en pleno DÃa del Pisco, muchos trataron de calentarse con nuestra bebida de bandera, pero el frÃo fue atroz y los limeños se congelaron en plenas celebraciones por Fiestas Patrias. “Ahora ni el pisco nos puede calentar.
Sentimos que nos congelamos”, indicó Jacinto Mendoza en la Plaza Mayor de Lima.