Washington, may. 03 .- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, responsabilizó por el derrame de petróleo en el Golfo de México a la petrolera británica British Petroleum (BP), a la que advirtió que deberá hacerse cargo de los costos de la limpieza.
“PermÃtame ser claro, BP es el responsable de este derrame. BP pagará la cuenta”, señaló Obama a periodistas tras su llegada a la población de Venice, en el estado de Luisiana, señala la BBC.
No obstante, el mandatario dijo que el gobierno no escatimará recursos para limpiar el derrame.
“Si bien habrá tiempo para investigar cabalmente lo que sucedió en la plataforma y deslindar responsabilidades, nuestro enfoque en este momento se centra en el esfuerzo de respuesta coordinada y persistente para detener la fuga y prevenir un mayor daño al golfo”, agregó Obama.
El mandatario también abordó las repercusiones económicas.
“El petróleo que sigue saliendo del pozo podrÃa dañar gravemente la economÃa y el medio ambiente de nuestros estados en el golfo”, expresó Obama.
“Y esto podrÃa extenderse por un largo rato. PodrÃa hacer peligrar el sustento económico de miles de estadounidenses que aquà viven”, agregó.
BP señaló que tomará al menos una semana antes de que empiecen a funcionar medidas temporales para detener la fuga del crudo.
Uno de los miembros del gabinete presidencial advirtió que podrÃan demorarse tres meses las tareas para detener la fuga de crudo de la boca del pozo submarino.
“Potencialmente esto podrÃa demorarse 90 dÃas antes de que se llegue a una solución definitiva y eso serÃa (la perforación de) un pozo de alivio”, señaló el secretario del Interior, Ken Salazar, en el programa dominical de la cadena NBC “Meet the Press”.
El crudo fluye a razón de 5 mil barriles diarios (955 mil) y, hasta el momento, no ha sido posible detenerlo.
El incidente obligó a Obama a frenar su programa de expansión de las perforaciones petroleras en el Golfo de México.
El derrame del petróleo se originó el 20 de abril en un pozo submarino de la empresa británica British Petroleum (BP) tras una explosión en la plataforma Deepwater Horizon.
Si bien aún se desconocen las causas del incidente, las crÃticas a BP aumentan, en reclamo de un mayor compromiso y acción para detener la pérdida de crudo.
La plataforma petrolera se hundió el 22 de abril y las últimas imágenes satelitales indican que la mancha está creciendo más rápidamente de lo previsto.
Antes de la llegada de Obama, algunas autoridades locales criticaron la “lentitud del gobierno” federal en su respuesta al derrame.
El gobernador del estado de Luisiana, Bobby Jindal, quien acompañó a Obama en la inspección de las zonas costeras afectadas, anteriormente instó a BP y a la Guardia Costera de Estados Unidos a responder con mayor celeridad al derrame petrolero.
“Este derrame petrolero no sólamente amenaza a nuestros pantanos y a nuestros bancos de pesca, sino a nuestra forma de vida”, dijo Jindal en una rueda de prensa el sábado.
Obama anunció previamente que se enviaron a la zona unos 1.900 trabajadores para lidiar con emergencias y más de 300 barcos y aviones.
Luisiana, Florida y Alabama declararon el estado de emergencia por la amenaza ambiental.
Según los expertos, esto podrÃa convertirse en el peor desastre ecológico de Estados Unidos, ya que las costas del Golfo y sus manglares -terrenos bajos pantanosos inundados por agua marina- son el hogar de numerosas especies de animales, como manatÃes, tortugas marinas, delfines, ballenas, marsopas y pelÃcanos.
Además, es una de las zonas de pesca más ricas del mundo, repleta de mariscos, ostras, mejillones, cangrejos y múltiples especies de peces, y la industria marÃtima aproximadamente US$ 1, 800 millones de dólares al año.