Una mancha de petróleo de varias millas de diámetro se desplaza por las aguas del Golfo de Méico en torno al área deonde una plataforma de producción petrolera costafuera explotó y se hundió esta semana.

El presidente de la petrolera British Petroleum admitió que “ciertamente hay el potencial de que esto sea una gran derrame”.

Hacía tiempo que no se producía un accidente de este tipo en las perforaciones petroleras en el mar , que actualmente son abundantes en distintas partes del mundo, incluyendo las costas de Estados Unidos, México, Brasil así como en mares de Europa y Asia.

La noticia viene a dar fuerza a los que se oponen a perforar en busca de petróleo en los mares próximos a Florida y después de que el presidente Barack Obama revertiera su oposición a esas perforación y decidiera dar luz verde a nuevas perforaciones en aguas territoriales de Estados Unidos, incluyendo el norte y centro de Florida. En la legislatura estatal también se debate hasta qué limites se debe permitir la perforación petrolera.

La explosión, cuyas causas se investigan, ocurrió frente a la costa de Luisiana, a unos 75 kilómetros de la localidad de Venice, y causó una enorme columna de fuego y humo.

Según la Guardia Costera, de los 126 empleados que trabajaban en la plataforma, aparte de los 11 dados por desaparecidos 98 fueron llevados a tierra en buenas condiciones y el resto fueron tratados por heridas de diferente gravedad en centros hospitalarios.