El director Nacional de Prevención de Desastres del Indeci, Alberto Bisbal, señaló el año pasado las comunas cusqueñas no usaron cerca de mil millones de soles del canon minero para prevenir los desastres que han perjudicado, principalmente, el sector Turismo.

“Los daños que han ocurrido en Cusco son de su entera responsabilidad. El Indeci es el rector de Defensa Civil en el país, pero los que operan antes y durante una emergencia son los municipios locales. Es injusto que exijan obras de prevención al Gobierno Central cuando la plata les está sobrando. Lo que pasa es que carecen de especialistas que generen proyectos”, expresó.

Sin embargo, reconoció que si bien la transferencia de competencias de los ministerios a los gobiernos regionales y municipales, a excepción de la ayuda humanitaria e inspecciones, está acompañada de una capacitación, “está no se puede desarrollar de la noche a la mañana. Es un proceso que toma su tiempo”.

El presidente de Perú Cámaras, Guillermo Vega, por su parte, rechazó estas afirmaciones. “El INDECI no explicó ni entrenó bien a los gobiernos locales y regionales para que puedan actuar frente a las emergencias por las lluvias. Además, opinó que ese organismo debe cumplir su función organizadora en los momentos de crisis y no solo en el momento de distribuir responsabilidades”.

Para Juan Luis Podestá, ex jefe del Indeci, existe un problema de liderazgo y de desconocimiento de funciones de las autoridades locales y regionales. “Una emergencia tiene que atenderse en forma inmediata. Si el problema se presenta a las 3 de la mañana, a esa hora tienen que tomarse acciones inmediatas, no esperar al día siguiente”, refirió.
Sobre las inundaciones y huaicos que aislaron al distrito de Machu Picchu Pueblo (Ex Aguas Calientes), Bisbal dijo que esta localidad, la más próxima al santuario, es un ejemplo de lo que no se debe hacer en materia urbana.

“Su población está ubicada en una zona de inundaciones, en pleno cauce de una quebrada por donde siempre caen avalanchas. Además, solo tiene una vía de acceso. Es una bomba de tiempo. Sin embargo, parece que pesan más los intereses económicos que genera el turismo, antes que hacer una gestión de prevención de riesgos en el lugar”, sostuvo.